El sueño de la cuarta estrella se ha topado con un durísimo golpe de realidad en el partido de ida de la final de la Liga BetPlay. Deportes Tolima cayó estrepitosamente 3-0 ante el Junior en el Metropolitano de Barranquilla, en un encuentro donde el equipo de Ibagué mostró su versión más desdibujada y cometió errores capitales que lo dejaron al borde del nocaut. Lo que se esperaba fuera un duelo táctico y parejo, se convirtió en un monólogo "Tiburón" durante la primera mitad.
El inicio del partido fue un auténtico calvario para los dirigidos por Lucas González. Junior, impulsado por su afición y una actuación memorable de José Enamorado, se mostró arrollador y letal. El primer gol llegó temprano, desestabilizando el esquema tolimense. La ofensiva local fue un vendaval de velocidad y precisión que nuestra defensa no pudo contener. Enamorado, la gran figura de la noche, marcó un doblete de antología. El 2-0 y el posterior 3-0, este último obra de Brayan Castrillón, cayeron en un lapso breve antes del descanso, dejando al Vinotinto y Oro completamente aturdido y sin capacidad de respuesta ni en el juego ni en el marcador.
El segundo tiempo trajo consigo el intento de reacción, pero la situación se agravó rápidamente. La expulsión de Sebastián Guzmán en los primeros minutos de la reanudación fue la estocada final. Con diez hombres en el campo, cualquier atisbo de descuento se desvaneció, obligando al equipo a replegarse y pensar únicamente en evitar un marcador más abultado. El cuerpo técnico intentó mover fichas, pero la superioridad numérica y anímica del Junior terminó por neutralizar cualquier esfuerzo de un Tolima que pareció jugar, según algunos análisis, "el peor partido de la temporada".
El 3-0 es un resultado categórico que pone al Junior con "pie y medio" en el título. La presión ahora recae totalmente sobre el Deportes Tolima y el estadio Manuel Murillo Toro. Para poder soñar con la cuarta, los de Lucas González necesitarán un triunfo por tres goles de diferencia para forzar los penales, o por cuatro o más para ser campeones directos. Es una tarea titánica y una prueba de carácter que definirá no solo la final, sino el ciclo del equipo en general. La afición ahora espera que el verdadero Pijao se levante y aparezca el martes en Ibagué para intentar una remontada que pasaría a la historia del fútbol colombiano.
FORMACIONES:
Junior: Mauro Silveira en el arco; Jhomier Guerrero, Jermein Peña, Lucas Monzón y Yeison Suárez en la línea defensiva; Didier Moreno, Jesús Rivas, José Enamorado, Yimmi Chará y Bryan Castrillón en el medio; y Guillermo Paiva en el ataque.
Deportes Tolima: Neto Volpi bajo los tres palos; Yhormar Hurtado, Marlon Torres, Anderson Angulo y Junior Hernández en defensa; Juan Pablo Nieto, Brayan Rovira, Jersson González, Kevin Pérez y Mauricio González en la mitad de cancha; y Adrián Parra en la delantera.
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